Lance es un demonio que, como castigo, tiene que ser guardián de las puertas del Cielo y el Infierno mintiendo a las almas para que entren en el Infierno. Nunca puede decir la verdad porque, si lo hace, desaparecerá. Solo le queda un alma más para ser liberado de su castigo. Para un demonio mentir es fácil, ¿verdad? Pero ¿qué pasa cuando el alma de la persona que más quiere se acerca a las Puertas del Juicio?